Brillo Eterno para tu Grifería Negra

La grifería negra se erige como una tendencia elegante en el diseño de interiores, aunque preservar su esplendor puede ser un verdadero desafío. Aquí te revelamos algunos trucos infalibles para que tu grifería brille con la luz de lo nuevo.

Muchas de mis clientas, (y me incluyo en el grupo) somos fieles usuarias de un descalcificador de agua… Sin embargo, es esencial saber que un descalcificador no garantiza la erradicación de las manchas blancas al 100%, y permíteme explicarte el porqué.

Manchas blancas con Descalcificador de Sal:

Al instalar un descalcificador de sal, se ajusta para eliminar gran parte de la cal presente en el agua; aquí es donde se lleva a cabo el intercambio iónico, cambiando el calcio por sodio. Aunque el agua deja de ser potable, no se puede regular el paso de calcio al 0%, pues de hacerlo, el agua se tornaría demasiado ácida, causando serios problemas de corrosión en tuberías y electrodomésticos. Son estas pequeñas trazas de cal las que dan lugar a las inevitables manchas en las superficies.

Manchas blancas con Descalcificador Electrónico:

Al instalar un descalcificador electrónico, este, a través de “IMPULSOS DE FRECUENCIAS”, neutraliza la cal para prevenir daños. Durante el proceso de neutralización, cada partícula de cal se fragmenta en más de 6 mil micropartículas; lo que antes era calcita se transforma en aragonita, y la cal pierde por completo su capacidad de adherencia. Sin embargo, cuando el agua se deposita en superficies en forma de gotas y se seca, se generan manchas, aunque una semana después, estas se limpiarán como si fueran polvo de madera.

En conclusión, sin importar el sistema de descalcificación que utilices en tu hogar, las manchas blancas que deja el agua seguirán existiendo; la única diferencia radica en la facilidad de limpieza de una opción respecto a la otra.

Truco 1: Vinagre Blanco:

El vinagre blanco es un aliado formidable. Mezcla una parte de vinagre con dos partes de agua y limpia suavemente con un paño de microfibra. Este encantador truco disuelve la cal sin dañar el acabado.

Truco 2: Agua Destilada:

Para las manchas más rebeldes, recurre al agua destilada. Al secar tu grifería con este elixir, evitarás las manchas blancas de cal que pueden empañar su belleza.


Truco 3: Jabón Neutro:

Realiza una limpieza semanal con agua tibia y jabón neutro. Este sencillo ritual preserva el brillo sin dejar rayones ni marcas indeseadas.

Protección Extra: Cera para Coches:

Aplicar una capa de cera para coches una o dos veces al mes puede ser la clave dorada para proteger tu grifería contra la cal y los restos de agua. Esta barrera mágica asegura que tu grifería mantenga su fulgor por más tiempo.

Implementa estos consejos y disfruta de una grifería negra siempre resplandeciente. ¡Tu baño o cocina te lo agradecerán!

Además de estos encantamientos, considera utilizar una toalla suave para secar la grifería tras cada uso. Este gesto previene la acumulación de agua y la aparición de manchas.

Consejo adicional: Evita los productos abrasivos:

Los limpiadores abrasivos pueden dañar el acabado de la grifería negra, así que es preferible optar por soluciones suaves y naturales para su cuidado.

Atención a los pequeños detalles: Revisa regularmente las uniones y las esquinas de tu grifería para asegurarte de que no haya acumulaciones de suciedad o cal. Un viejo cepillo de dientes puede convertirse en tu mejor aliado para limpiar esos rincones difíciles de alcanzar.

Con un cuidado regular y estos sencillos trucos, tu grifería negra no solo será un punto focal en tu espacio, sino que también mantendrá su elegancia y funcionalidad a lo largo del tiempo. Recuerda que un poco de mantenimiento preventivo puede marcar una gran diferencia en la durabilidad y apariencia de tus accesorios de baño y cocina. ¡Disfruta de un ambiente moderno y sofisticado!

Scroll al inicio
Estás cookies no tienen azúcar ♥    Más información
Privacidad